Ansiedad en confinamiento, cómo sobrellevarlo.

Todos conocíamos la palabra confinamiento pero puede que nunca nos hubiéramos imaginado encontrarnos en esta situación así que tampoco estábamos preparados para ello. En menos de un mes hemos visto como un nuevo virus entraba en nuestras vidas y nos restringía todas nuestras libertades, rutinas y relaciones. Hemos dejado de ver a nuestros amigos y familiares, lidiamos con el teletrabajo, la vida familiar y mucho tiempo libre, nuestras vidas cambian radicalmente y no sabemos cuánto va a durar.

Todo esto puede provocarnos un malestar desconocido o elevar estados de estrés, ansiedad y depresión. Cada persona reacciona de manera diferente a las situaciones estresantes y debemos estar atentos a los indicadores para poder combatirlos.

Entre las personas que podrían tener respuestas más fuertes al estrés de una crisis se incluyen:

• Personas de la tercera edad que están en mayor riesgo y sienten el miedo de contraer el COVID-19 y la lejanía de sus familiares.

• Personas con enfermedades crónicas que también son más vulnerables al virus.

• Niños que pueden no entender tal cambio en sus vidas y sentir mucho miedo ante el desconocimiento.

• Adolescentes que pueden distorsionar la realidad de la situación, no saber gestionar las emociones y ni siquiera comunicarlas.

• Personal y trabajadores que se enfrentan al contagio a diario y pueden no estar preparados para la presión que puede suponer.

• Personas que ya sufren problemas de salud mental.

• Personas que se encuentran completamente solas durante el confinamiento.

Algunos de los síntomas de estrés y ansiedad ante la pandemia pueden suponer:

• Temor y preocupación por su propia salud y la de sus seres queridos.

• Cambios en sus patrones de sueño o alimentación.

• Dificultad para dormir o concentrarse.

• Empeoramiento de los problemas de salud crónicos.

• Aumento del consumo de alcohol, tabaco u otras drogas.

Qué cosas podemos hacer para sentirnos mejor, aunque puedan parecer evidentes:

Construir una comunidad fuerte y consciente.

Cuidar de uno mismo y cuidar de nuestros amigos y familia. Durante este periodo, que por el momento no sabemos cuánto va a durar, es posible que todos pasemos por algunos momentos de dudas y temores. Para entonces será importante que nuestro núcleo se mantenga fuerte para poder ayudarnos a sobrellevar el estrés, del mismo modo que lo haremos nosotros cuando esto le suceda a otras personas.

Dejar de ver, leer y escuchar todo el día sobre la pandemia. 

Sí, estar informado es importante pero la información, sea cierta o falsa, nos sobrepasa en muchas ocasiones. Esta vez ni siquiera en las redes sociales o los programas de televisión de entretenimiento se habla de otra cosa y lo mismo pasa en tus conversaciones de whatsapp. Debes permitirte la opción de desconectar del exterior.

Quizás una buena idea pueda ser informarte de la actualidad del modo que más te guste pero solo una vez al día, durante el tiempo que dure un telenoticias o mientras desayunas, nunca antes de acostarte.

Cuida tu cuerpo, muévete y no te abandones a la mala comida.

No es ninguna novedad que hacer ejercicio de cualquier tipo activa en nosotros todos los mecanismos para sentirnos mejor y no solo eso, para cuando todo esto haya pasado, no haber movido nuestro cuerpo en semanas hará mucho más difícil la vuelta a nuestras amadas rutinas. Debes encontrar la manera de mover tu cuerpo, ya sea limpiando, bailando o estirando tus músculos.

En cuanto a comida se refiere, no poder salir de casa y la ansiedad son muchas veces detonantes de comer demasiado y mal. Nadie pide que nos alimentemos solo de verduras pero sí que planteemos un poco la dieta de la semana, de esta manera podremos comprar todo lo que necesitamos con una sola visita al super, nos daremos cuenta de si nuestra dieta es equilibrada o no y decidiremos qué y cuándo nos podemos dar un capricho alimenticio. 

Poder dedicar tiempo a cocinar y a hacer recetas nuevas también puede ayudarnos en esto.

Dormir las horas que el cuerpo nos pida, ni más ni menos.

¡Hay que desperezarse! Si dejamos que nos gobierne la pereza, no nos moveremos de la cama o del sofá y esto nos llevará a malas sensaciones. Seguir un horario, al menos durante la semana, nos ayudará a sobrellevar los días. Planifica a que hora te levantas y a que horas toca comer. Si teletrabajas mantén un horario fijo y no sucumbas al ocio hasta que termine tu jornada laboral.

¿Qué hago con tanto tiempo libre?

Cuando la ansiedad nos invade encontrar la tarea que nos animará a levantarnos puede parecer imposible. En primer lugar y antes de empezar con cualquier cosa nuestro objetivo principal debe ser la limpieza y el orden. Encontrarnos en un espacio sano y agradable a nuestros sentidos nos ayudará a continuar con otra tarea que nos haga sentir mejor y nos mantenga la cabeza ocupada.

Hay tantas posibilidades como personas ofreciendo ideas, concéntrate en tí y descubre qué te apetece de verdad.

Desde Satisfarma preparamos tres propuestas que encontraréis al final de este blog.

En ningún caso te aisles, no podemos abrazarnos pero sí hablar.

Aunque para unos es más necesario que para otros, el contacto físico es esencial para cualquier persona y para aquellos que se encuentran solos pasando el confinamiento esto puede convertirse en un problema importante. Es cierto que no hay manera de suplantar el contacto real pero hay maneras de sentirnos menos solos. Practica el popular arte de las videollamadas, son gratuïtas y multitudinarias y pueden cambiar tu estado de ánimo.

Aprovecha estas llamadas para explicar cómo te sientes y pedir ayuda si así lo necesitas.

Sentir ansiedad ante la incertidumbre y los miedos que puede provocar una pandemia es algo normal y se le debe dar la importancia necesaria para que podamos ser todos conscientes y apoyar a la gente que nos rodea.

Si sientes que la situación te sobrepasa y emociones como la tristeza te gobiernan pide ayuda.

TRES SATISPROPUESTAS PARA HACER EN CASA