Dentífricos

Cuando elegimos las cremas u otros productos de los que forman parte nuestra rutina de cuidado habitual, nos fijamos en sus componentes, en qué propiedades tienen y en cómo funcionarán en nuestro cuerpo. Pero no es así en otro producto tanto o más importante que estos, nuestro dentífrico.

Muchas personas tienen en cuenta a la hora de elegir un dentífrico cual es su color, su olor y su sabor, y descuidan lo más importante, sus propiedades y su composición. Un buen dentífrico no solo tiene la función de limpiar de forma adecuada nuestra boca, sino que van mucho más allá y a veces no lo tenemos en cuenta y nos dejamos atraer por el propio marketing de según que marcas. A la hora de elegir una buena pasta dental y asegurarnos que aquel dentífrico que estamos usando diariamente es el adecuado, debemos saber que existen gran variedad de opciones para poder cubrir la diferentes necesidades que podamos tener. Por tanto, lo primero que debemos tener claro es que el color del dentífrico no tiene nada que ver en cuanto a sus propiedades. Si eres de las personas que disfrutan de una salud dental óptima, puedes decantarte por un tipo de dentífrico que además de proporcionarte una buena limpieza bucodental, te aporte un agradable aliento fresco. En cambio si eres de las personas que sufren cualquier tipo de afección, tendrás que tener en cuenta muchos otros factores y componentes del producto antes de decidir con cual te quedas.

De entre todos los tipos de dentífricos que puedes encontrar, el primero que queremos destacar es el dentífrico diseñado especialmente para dientes sensibles. En este caso deberemos elegir un dentífrico que se encargue de reforzar nuestro esmalte dental, que lo que hará será sellar la dentina, para que tanto el frío como el calor de los alimentos que consumimos, no penetre en nuestro dientes y evitemos así esa molesta sensación que experimentamos sobretodo cuando comemos alimentos especialmente fríos. También encontramos unos dentífricos pensados específicamente para proteger nuestras encías. Este tipo de pasta dental se caracteriza por poseer en su composición, antisépticos que evitarán infecciones causadas por ejemplo, por la gingivitis. Para estos casos contamos con gran variedad de marcas muy indicadas para aquellos pacientes con este tipo de dolencia o con sangrado de encías.

La gingivitis es un tipo de dolencia que mediante la presencia de bacterias, nos provoca una inflamación y un sangrado de nuestras encías. Esto ocurre porque se quedan restos de comida entre los dientes, y se traduce en la aparición de placa y de sarro que a medida que se van acumulando, nos van irritando las encías y finalmente nos provocan este tipo de enfermedad. Esto puede ocurrir por llevar un tipo de higiene bucodental deficiente, pero también puede deberse a otros factores como una mal posición dentaria, los cambios hormonales o al uso de ciertos medicamentos.

Siguiendo con los tipos de dentífricos que podemos encontrar, nos encontramos aquellos que contienen flúor. Este tipo de pasta dental, nos ayudarán a inhibir la formación de ácidos y también nos ayudarán a reforzar los dientes, remineralizando el esmalte y evitando el daño causado por las bacterias antes comentado. Dicho esto, debemos tener en cuenta que los dentífricos con flúor no son recomendables para los niños, y que además en el caso de los adultos, deberemos tener en cuenta que siempre debemos buscar la cantidad de flúor adecuada y no elegir la pasta dental con más cantidad de flúor, ya que podría causarnos la aparición de fluorosis. También debemos destacar las pastas dentales que han sido expresamente diseñadas para tratar la afección y que acostumbran a contener en su formulación, un alto contenido en clorhexidina, por lo que no se recomienda prolongar su uso más allá de los 15 días. Por último, debemos hablar de las pastas anti sarro, las cuales se caracterizan por su función de prevención frente a la acumulación de la placa, pero que por el contrario no son eficaces ante la eliminación del sarro, y de los dentífricos blanqueadores, que aseguran que tienen propiedades blanqueantes, aunque en algunos casos esto es solo marketing. Este tipo de dentífrico posee en su composición, en muchos casos, grandes cantidades de bicarbonato de sodio, flúor y muchos otros componentes químicos, los cuales pueden causarnos un deterioro de nuestro esmalte si abusamos de ellos.