Una de las primeras preguntas que nos vendrán a la cabeza, seguramente sea el por qué de usar un sacaleches. Durante el embarazo seguramente no hayas pensado demasiado en este accesorio y te hayas centrado en otros que son más urgentes, pero sin duda el sacaleches se volverá algo muy importante para ti. Podemos esperar al nacimiento mismo del bebé para adquirirlo, ya que cada una de nosotras es diferente y por tanto, tendremos unas necesidades diferentes. Por ejemplo, habrá algunas madres que puedan pasar mucho tiempo cerca de su bebé, y habrá otras madres que deberán acudir al trabajo. Por tanto, la primera recomendación es conocer las diferentes soluciones que existen para la extracción de la leche para el bebé, y a partir de ahí, decidas cual de ellos encajará mejor en tu situación particular.
A grandes rasgos, podemos encontrar tres tipos de sacaleches diferentes para no depender de la lactancia en todo momento. Una de las primeras diferencias que podremos observar será si queremos un sacaleches de tipo manual o uno de tipo eléctrico. Los primeros, los manuales serán más baratos y silenciosos, y acostumbran a usarse para extracciones puntuales. Este tipo basa su funcionamiento en bombear para conseguir la extracción, pero este tipo de sacaleches suelen llevar mucho trabajo y pueden llegar a cansar aún mas a las madres. Por tanto, llegamos a la conclusión de que los sacaleches eléctricos serán no solo más prácticos, sino mucho más usados. En este tipo será el motor eléctrico el que se encargue de la extracción y suelen ir con pilas o con baterías recargables.