Aceites esenciales - Aromaterapia

Seguramente, la gran mayoría de nosotros hemos oído hablar de la aromaterapia, pero sin embargo pocos sabemos cuales son realmente los beneficios que nos puede aportar a nivel físico y mental a través de los aceites esenciales que se emplean en la misma.

Lo primero que debemos saber acerca de la aromaterapia es qué es y en qué se basa. Desde las más antiguas civilizaciones se ha ido utilizando la aromaterapia, y ya en aquel entonces se conocían sus múltiples beneficios mediante masajes, baños y en la tratamientos utilizados a diario. La aromaterapia consiste en una técnica en la que se utilizan los aceites esenciales procedentes de muchas plantas y flores, para ayudarnos a mejorar gran variedad de dolencias, ya sean psíquicas o físicas. Para conseguir estos aceites esenciales se procede a un proceso de extracción de los compuestos vegetales y de las esencias de las plantas aromáticas, para posteriormente destilarlos o prensarlos mediante una serie de técnicas que consiguen garantizar su pureza y su calidad.

La aromaterapia por tanto, es el uso de los aceites esenciales de algunas plantas para mejorar nuestra calidad de vida y reducir nuestra tensión, nuestra ansiedad, el dolor, las náuseas o los vómitos, entre otras muchas dolencias. Además, la aromaterapia puede ser utilizada junto a otros tratamientos complementarios, como por ejemplo mediante un masaje o la acupuntura, y también con otros tratamientos médicos. Los aceites esenciales usados en la aromaterapia son la parte que contiene la fragancia de las plantas, la cual suele estar debajo de las hojas, de la corteza o de la cáscara de las mismas. Para conseguir esta fragancia, hay que liberarla mediante la trituración de la planta, su cocción o maceración, entre otras técnicas. Cada uno de los diferentes aceites esenciales que se utilizan en aromaterapia presenta una composición química diferente, y por tanto cada una de ellas tendrá un olor y unas propiedades medicinales distintas.

Los aceites esenciales usados en la aromaterapia, se pueden usar de diversas maneras. La primera de ellas es por inhalación indirecta: se da cuando el paciente aspira un aceite esencial determinado, mediante el uso de un difusor, un aparato que sirve para dispensar el aceite esencial en cuestión por el aire, o mediante la aplicación de gotas sobre un tejido colocado en un lugar cercano. Otro de los métodos de aplicación de los aceites esenciales es mediante inhalación directa, que consiste en aspirar un aceite esencial mediante un inhalador individual, con gotas de aceite esencial flotando sobre agua caliente. Por último, debemos hablar de los masajes de aromaterapia, aplicados directamente sobre la piel con uno o con más aceites esenciales, que se diluyen en un aceite conocido como portador o base. Además de mediante estos tres métodos de aplicación diferentes, los aceites esenciales también se pueden mezclar con sales de baño, con lociones o en vendajes.

Algunos de los aceites esenciales más conocidos son:

- Aceite esencial de lavanda, que nos ayudará a relajarnos y a combatir el insomnio.

- Aceite esencial de romero, que tiene efectos beneficiosos a la hora de estimular nuestra capacidad de concentración.

- Aceite esencial de menta piperita, que nos ayudará a subir nuestro biorritmo y nuestra energía.

- Aceite esencial de limón, que facilita la concentración.

- Aceite esencial de árbol del té, excelente antiséptico.

- Aceite esencial de ravintsara, estimula las defensas mejorando el sistema inmune.

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